Hace unos meses BBVA anunciaba el cajero automático del futuro, con unas posibilidades de personalizar la experiencia y contacto con la entidad novedosas y centradas en el usuario. En esta ocasión me gustaría destacar el acercamiento que realizan al digital signage, como medio que aporta nuevos servicios al cliente de sus oficinas bancarias.
Se alejan de las implantaciones convencionales, con contenidos enfocados al exterior (escaparate) y creatividades convencionales, en busca de un servicio adaptado a las necesidades del público que acude a las oficinas. Como puedes observar en las imágenes la implantación consta de un sistema de optimización de turnos en función del tipo de operación que el cliente desea hacer. De esta forma el servicio también puede ser más personalizado, adaptado a la necesidad principal de la visita a la sucursal. En el frontal principal disponen de tres pantallas integradas en un mismo soporte y en línea con la comunicación visual de la marca BBVA, un paso que sin duda es positivo dentro del digital signage en retail, ya que hasta el momento las integraciones han sido escasas y por tanto la imagen del medio no acompañaba su potencial.
No he podido disfrutar de los tipos de contenidos que emiten en el soporte de tres pantallas, pero la ubicación parece indicar que se dirigen a comunicar, amenizar y fomentar la venta cruzada del público durante su espera a ser atendido. Una de las características más básicas del digital signage como medio corporativo, pero que hasta el momento se ha obviado con contenidos de bajo interés, poca relevancia o no adaptados al medio. Estoy seguro que la estrategia de contenidos de BBVA busca una conexión mayor y huye de estos tópicos descritos, para completar la estrategia de servicio que inician desde la entrada en la sucursal. De esta forma, las zonas clave de comunicación en oficinas bancarias, cajeros e interior de gestiones, se completan con el